Muy complicado el escenario en el que nos ha colocado el desproporcionado incremento en el precio de los combustibles a los transportistas del país. Este año luce complejo por la nueva composición de costos que nos llevará a un mercado abierto de gasolinas.
En definitiva, los transportistas tenemos ya nuevos retos que atender, debido a que de inmediato ingresa-remos en la etapa en que los precios de los combustibles cambiarán día con día en el país. El esquema de liberación de costos de las gasolinas nos obliga a una nueva manera de ver el negocio, sin duda, estamos en una fase en que los empresarios debemos reconfigurar los esquemas, así como conocer la estructura de costos de nuestras empresas.
Un cambio, una nueva manera de ofrecer el servicio, es lo que corresponde de nuestra parte. Tenemos que adaptarnos a este complicado entorno doméstico y geopolítica que se vive en la actualidad, modificando los procesos que nos lleve a soportar lo que representa para los transportistas el alza de los combustibles.
Como un organismo responsable, CANACAR siempre se manifestará de manera pacífica, por ello, en días pasados, firmamos ante la SCT un acuerdo para trabajar en conjunto, definiendo las acciones para reducir los efectos negativos en nuestros costos por dichos incrementos.
Nuestra organización ha mantenido, de manera propositiva, desde el primer día del año, un constante acercamiento con la autoridad hacendaria llevando a la mesa propuestas fiscales para encontrar las soluciones que ayuden a mitigar el fuerte incremento del precio del principal insumo del autotrans-porte de carga.