Primero, permítanme poner el contexto:
En su amplia mayoría, las empresas de autotransporte mexicanas tienen su origen en la familia. Quienes hoy estamos recibiendo la estafeta, somos ya la tercer generación. La primera, nuestros Abuelos, asumieron el reto de fundarlas cuando en nuestro país predominaba el llamado modelo estabilizador y el sello distintivo de la política pública hacia nuestro sector fue el paternalismo.
Nuestros Padres, segunda generación, nacieron como empresarios cuando nuestra industria vivió en México la primera gran transformación, las características del nuevo modelo llamado neoliberal fueron la desregulación, apertura total y libre competencia; cero participación del Estado y “todo el poder al mercado”. Ellos tuvieron la inteligencia de constituir un instrumento, CANACAR, que condujo al sector en este proceso y logró gestionar, frente al gobierno, una etapa de transición.
Hoy corresponde, a esta nueva generación, recoger esa estafeta y asumir ese gran compromiso que significa enfrentar los nuevos retos de una industria, que se asume a sí misma como estratégica y prioritaria.
1.El primer gran reto que como jóvenes empresarios debemos asumir, es el de reconocer como una necesidad el seguir contando con un instrumento como CANACAR, cuya razón de ser es el de identificar los factores que inhiben el desarrollo del mercado a efecto de que, en su carácter de órgano de consulta, gestione las condiciones necesarios para una competencia leal y justa.
2.Otro reto importante es de concepción: debemos concebir al autotransporte de carga como parte de toda la cadena de creación de valor, llamada cadena logística y, en ese sentido, impulsar a las empresas a incorporar servicios de valor agregado para competir en mejores condiciones en el mercado.
3.Parte de nuestra responsabilidad es también estar al pendiente de las tendencias, no sólo en México, sino en el mundo. Sin duda alguna, el COVID vino a reconfigurar el mercado: el comercio electrónico, la tecnología en el transporte y la optimización de costos cobraron relevancia.
4.En esta nueva fase de desarrollo de nuestro sector sobrevivirán las empresas más eficientes y productivas, que logren mejorar su rentabilidad a través del empleo de equipos de transporte inteligentes. El uso de la tecnología en el transporte de mercancías asegura la reducción inteligente de los costos, ya que permite una administración eficiente y segura de la flota, optimizando las rutas de circulación mientras se monitorean los consumos de combustible, hábitos de conducción y desempeño del motor.
5.La renovación del parque vehicular sigue siendo una de las más grandes prioridades. Para ello hay que prepararse para responder a las necesidades del mercado y explorar nuevas formas de hacerse de equipo, como el arrendamiento, un atractivo producto financiero con el que se accede a tecnología de punta y renovación de flota sin descapitalizarse.
6.De igual forma la disrupción tecnológica facilitará la implementación de la tecnología 5G para incrementar la conectividad de los vehículos. Esto permitirá la reducción de errores humanos, la optimización de rutas y acelerar la toma de decisiones ya que todos los procesos logísticos se monitorean en tiempo real mediante dispositivos electrónicos.
7.Sin duda el más grande reto que estamos enfrentando es el de la falta de conductores. Este importante desafío debemos crear estrategias inteligentes que permitan captar y capacitar operadores, con el fin de profesionalizarlos de acuerdo a las normas de la industria del transporte para que realicen maniobras de manejo seguras, responsables y eficientes que optimicen su proceso de entrega.
8. Y que decir del cambio climático, tema apremiante a nivel internacional. La reducción de gases efecto invernaderos es un compromiso mundial, ello nos obliga a transitar hacia una movilidad sustentable. Los camiones de carga con tecnologías de propulsión más limpias tienen menos costo total de propiedad y más ahorros de mantenimiento durante la vida útil del vehículo, además una de las principales razones por la cual las flotas verdes serán tendencia por el ahorro de combustible.
9. Finalmente, la digitalización es sumamente importante para la evolución de nuestra industria, sobre todo en el área administrativa, operativa y logística. El CFDI-Complemento Carta Porte representa un gran reto en este sentido, en especial la recopilación de información para el llenado del documento el cual debe incluir información detallada sobre la mercancía, operador y unidad en la que fue trasladada. Ante dicho panorama, las empresas tendrán que buscar soluciones que les permitan disminuir la carga administrativa y desarrollar sistemas que faciliten el intercambio de información para el llenado del documento.