Santa Catarina, Nuevo León, julio de 2024.
- El Viaducto Santa Catarina permite el tráfico a cualquier tipo de vehículo, lo que lo convierte en una opción versátil y accesible para todos sus usuarios.
- Con el uso del Viaducto Santa Catarina los usuarios pueden ahorrar hasta 20 minutos en promedio en sus desplazamientos.
El Viaducto Santa Catarina es un gran avance en el esfuerzo por mejorar la conectividad y fomentar una movilidad eficiente en el estado de Nuevo León. Con un innovador diseño, este viaducto permite el tráfico a vehículos pesados, lo que lo convierte en una opción versátil y accesible para todos sus usuarios.
Esta obra es todo un símbolo de modernidad y eficiencia en la infraestructura vial en México. Con una extensión de 7.9 kilómetros y dos carriles en cada dirección, este viaducto se eleva sobre el Río Santa Catarina para ofrecer un trayecto seguro y eficaz hasta el centro de Monterrey.
Su ubicación lo convierte en un tramo clave para los profesionales del transporte de carga, ya que da acceso a vías y rutas de distribución estratégicas para el transporte de mercancías, facilitando la conexión entre puntos clave de Monterrey. Al ser una extensión de la Autopista Monterey-Satillo, se puede llegar a la ciudad sin necesidad de salirse en la Plaza de cobro de Periférico, saliendo directamente a las avenidas Antonio L. Rodríguez o Gustavo Díaz Ordaz. Y en dirección a Saltillo, accediendo desde ambas avenidas, ahorrando hasta 20 minutos, lo que se traduce en una circulación más fluida al evitar el área metropolitana de la ciudad y la zona industrial de Santa Catarina.
Gracias a esto, el Viaducto Santa Catarina evita la congestión en la carretera libre Saltillo-Monterrey, especialmente en el tramo entre el Periférico de Monterrey y el centro de la ciudad.
Además, al igual que toda la autopista, el viaducto está equipado con cámaras de seguridad, integradas en un sistema de control que opera para proteger a los usuarios, así como rampas de frenado y muros de contención diseñados especialmente para hacer el trayecto más seguro.
Esta infraestructura no solo representa un avance en movilidad, sino que también atrae inversión extranjera, abriendo oportunidades de nearshoring y fortaleciendo la economía local.